Hogar [Privado July]

*Era tiempo, no faltaba nada para que llegarán a esa casa a la que en un momento podría llamar hogar. El joven Doll simplemente cancelo su habilidad para seguirlo con su vista normal, también debía ahorrar algo de energía si es que quería seguir caminando.

Y fue ahí, donde la veía por primera vez. No pudo pensar en nada más que un simple* -…Es viejo…- *Pero no se molestó para nada en aceptar su invitación. Soltó su mano para adentrarse a la estructura, observando alrededor con sus orbes grisáceos. Si, definitivo, sentía aquello acogedor, como si le hiciera sentirse bien* -¿Qué? ¿Tan vigilado quieres tener a July!?- *Gruño el animal en cuanto mencionó aquello de avisar sobre las salidas. Más la pequeña mano del niño lo tomó y lo colocó sobre uno de los muebles* -…Comprendo…Lo haré- *Afirmó sin problemas con aquel tono de voz sedentario suyo.

Debía aceptar la palabra de su dueño, o en este caso, de su creador, si es que siquiera quería conseguir el comprender mejor lo que pasaba a su alrededor. Ahora ver como le entregaba sin esfuerzo una habitación personal, lo hacía tener algo revueltos sus conocimientos, si, definitivamente aun tenía mucho que aprender* -…Gracias…- *Contestó simple ante sus educadas palabras. Era amable, a pesar de su especie, cuidadoso, pero a si mismo, misterioso, ocultaba cosas que ni él sabía* -Wow! Por fin tendrás un dormitorio propio- *Regresó su compañero para examinar el área, aprovechando que el mayor los había dejado.
El Doll simplemente fue donde la cama para rosar con sus yemas su superficie* -…También un hogar…- *Le completó al momento de que se despojaba de la boina y el saco, que dejó cuidadoso para subir a la cama y sentirla mejor* -Ey, July…En verdad ¿Vas a considerar este lugar como para quedarte? ¿Con ese hombre?- -November no me pudo ofrecer esto…- *Declaró rotundo, cosa que dejo sin palabras al animal.

Se levantó de la cama para ir fuera del cuarto, sin siquiera voltearle la mirada. No se importaba mucho de si lo había lastimado con sus palabras, aun no entendía esas cosas. Solo seguía su inconsciente curiosidad* -…¿Qué haces ahí?...- *Cuestiona con su fina y juvenil voz mientras bajaba las escaleras para ir donde el mayor, así, al estar a su cercanía, ya con la cabeza descubierta y sin tanto abrigo, le miró fijamente, serio* -El laboratorio…- *Señaló para evitar cualquier confusión en sus palabras* -Hace unos momentos me has mencionado que…No entre sin tu permiso…¿Hay algo que no tenga que ver, conocer, saber?- *Le dijo claro sin desviar ni un momento la mirada de la del contrario.

Estaba claro que quería saber, necesitaba saberlo; de lo contrario, no podría utilizar su habilidad de registro utilizando los espejos o vidrios como médiums, mientras se mantuviera en ese lugar. Porque si, de cierta forma, July era muy respetuoso con lo ajeno y se imponía sus propios límites.

*Escuchó atento a su respuesta, la cual lo dejó completamente en claro. Al parecer, podría hacer un ligero rastreo al lugar, pero lo importante era el no entrar a ese lugar, más bien, evitar entrar al laboratorio. Debía señalarlo así para gravarlo mejor en su memoria. Y a pesar de que le estaba dando la opción de pedir su permiso, a su criterio, veía que lo mejor era dejar ese espacio privado para el mayor* -Gracias…- *Volvió a mencionar en cuanto señaló el tiempo de trabajo, que de cierto modo no le importaría, no es como si disfrutará de dormir.

Un poco alejado de ellos se encontraba el animal, quien escuchó por completo lo que era del laboratorio, y que bueno, porque tenía todas las intenciones de entrar sigiloso a ver que tanto así, pero, si veía que el Doll lo aceptaba, él también lo haría, lo menos que quería era romper el lazo que tenía con el niño* -Dime ¿Por qué te pondrías violento?- *Habló por fin este, interrumpiendo el cuestionamiento que le hacía al menor.

Corrió por el respaldo del mueble donde se encontraba reposando el mayor, así sentándose a su lado, manteniendo su distancia* -…Mao…- -¿En verdad es suficiente una puerta para evitar tu violencia? Eres un monstruo, nada asegura que estando en esas condiciones no lastimes a July- *Le recalcó rotundo, retándole con la mirada. Aun cuando lo intentaba, no podía darle tan fácil su confianza* -Aun cuando digas que quieres cuidarlo como un pa…- -Él es mi padre, Mao…También debes de obedecerlo…- *Lo silencio para solo darse la vuelta e ir donde la puerta de entrada.

El Doll, como si no hubiera escuchado, se remangó las mangas de su camisa, se sentó en el suelo y se despojó de su calzado al igual que sus calcetas, terminando con sus claras piernas al aire. Se levantó y volvió la mirada donde ellos* -Arreglaré el jardín…Esta muy descuidado…- *Les señaló con su típico tono de voz robótico para dejar sus cosas en un lado, bien acomodado para ir a hacer lo dicho. Sabía que las palabras influían mucho en él, pero simplemente ya estaba algo confundido como para recibir más información que actuara de esa misma manera, por eso mismo escogió el salir, sabía que los humanos despejaban su cabeza en la jardinería*

*El Doll se mantuvo parado frente la puerta tan solo un momento, observando al contrario en silencio y aunque pudiera parecer que lo escuchaba, estaba realmente sumergido en sus pensamientos, a lo que solo atinó a asentir con su cabeza para revisar lo que sería su área de despeje.

En cuanto a la ardilla, bueno, él se mantuvo en silencio junto al contrario, observando como trabajaba en esa vieja máquina sin entender en su totalidad lo que hacía, simplemente se mantuvo ahí. De algún modo quería comprender un poco más el mundo que giraba alrededor de su pequeño compañero*

-April lo hacía…- *Mencionó el menor sin siquiera mirarlo, palmeando la tierra y arrancando algunas hiervas. Se había notado lo duro que había trabajado en esas pocas horas que habían pasado, gran parte del jardín se encontraba en su totalidad limpio y fuera de aquella plaga. La tierra estaba ligeramente escarbada y las partes deñadas de las buenas plantas fueron removidas* -…A ella le gustaba que todo se viera…Bien…- *Concluyó para levantarse de su lugar, pasando su brazo por su frente y limpiando el claro sudor dejando algo de manchas en su ya sucio rostro, aunque claro, así estaba por todas partes, piernas, brazos, hombros, torso.

Se acercó al contrario al escucharlo, mientras se sacudía ligero las manos, removiendo la tierra que quedó dentro sus uñas, para así levantar su rostro al contrario, manteniéndose serio e indiferente* -…Podría ser…Conocerme…Comprender el trabajo que tuviste que hacer conmigo…- *Pero se quedó por un momento en silencio, bajando ligero su mirada. Tenía muchas dudas de su propia existencia, hasta hace unas horas no sabía que realmente había tenido un creador en sí. Por lo que…Si es un ser relativamente artificial, entonces habría más como él? Tan débiles?

Descartó ese tipo de pensamientos y simplemente volvió a lo normal, tranquilo y dispuesto a hacer lo dicho* -…Si quieres que los vea…Lo haré-

*Se dejó hacer por el contrario, cerrando ligero uno de sus ojos ante el acto* -Atenderé a lo que me digas…- *Le afirmo de igual forma. Eso de llamarlo como Padre era en parte agradable, pero de igual algo doloroso, como si haya remplazado a aquel primero a quien llamó de esa forma. Aunque si veía bien las cosas, a quien ahora tenía presente, en verdad es quien tenía todo el derecho de ese título, lo cual aceptó.

Dejando aun sus cosas donde estaban, para no ensuciarlas, claro, fue donde las escaleras, para escucharlo y asentir con su cabeza para proseguir con lo suyo. Un baño, sería caliente? Al menos podría hacerlo en una ducha y más como una “persona”*

-Oe! No me vengas a joder con eso- *Dijo aun gruñón el animal cruzando sus patas mirando al contrario desde el mueble de enfrente* -Claramente soy un macho, acaso eres ciego, mi cola es más esponjosa- *Mao por su parte, también estaba algo pensativo. Las reacciones y forma en que le hablaba el Doll, como lo reprendía sin ser así, lo hacían sentirse diferente y eso afectaba, al menos, de la mejor manera* -Te tengo vigilado, Monstruo…- *Y así saltó de su lugar para correr primero al cuarto del menor y acompañarlo con su ducha.

No tardó en el baño, tampoco es de que fuera a disfrutarlo, solo iba a lo que es, limpiarse y ahora teniendo a su compañero, lo ayudó a estar igual, limpio. Ya cuando el demonio se hizo presente en su habitación July estaba sentado fuera en el balcón con una simple camisa holgada puesta, de un claro y algo desgastado blanco, mientras que el animal se restregaba en la toalla que dejó sobre la mesa.

Giró su mirada en cuanto lo escuchó entrar y así chocar su mirada indiferente y más centrada en el presente* -…Bien…- *Contestó a su emisor mientras se ponía de pie e iba a su frente levantando la mirada a él* -¿Tienes hambre?- *Cuestionó sin más, examinando sus gestos y sus palabras que relativamente eran algo confusas* -No tengo la necesidad de comer…- *Ladeo ligero su cabeza como acto infantil* -Pero puedo prepárate algo…Así evitarías el salir…- -July, July! Yo si tengo hambre- *Señaló al instante el animal descubriendo su cabeza para mirarlo todo esponjado*  

*Mao simplemente le negó la mirada* -Monstruos, no comprenden el verdadero arte de la seducción- *Concluyó simple.

-Me encuentro en perfectas condiciones…- *Contestó tranquilo, sin comprender del todo la razón de sus cuestionamientos, simplemente se dejó hacer por el mayor, manteniéndose quieto, tal y como una muñeca, de ese modo no le molestaría o le incomodaría. Su mirada no se perdió de la de su emisor, a lo que le pareció curioso su forma de observarlo, había un cambio en ello y eso en parte no comprendía, pero se puso en guardia por cualquier negativo, que por su suerte era una falsa alarma* -El resto de la ropa es muy grande…Me queda estorbosa, impide que mis movimientos sean puntuales…- *Aclaró asando su mirada a la ropa sucia, que por igual, estaba bien doblada y colocada en un lado cercano a la cama.

El animal, algo sorprendido por el nuevo cambio agregado en el Doll corrió donde él para subir a su hombro* -¿En verdad pudo hacer eso? Ahora eres un humano July!- *Le dijo animado. Era claro que, por su poco, por no decir nula comprensión, no entendía como se estaban moviendo las cosas. Pero el pequeño no le contesto a ello, tardaría mucho en explicarle y dejarlo entender* -…Vamos a comer…- *Le señaló dibujando una diminuta sonrisa para llevarlo en el hombro hasta la cocina*

-Puedo ayudarte a encontrar esas plantas si las quieres, July. Eh? Miren quien se decidió a mostrarse ¿Ya te cansaste de trabajar en tus rarezas?- *Comentó la ardilla sentado en la mesa ya con su plato limpio y la barriga inflada* -¿Quieres comer?...- *Invitó el menor que se encontraba, por igual, sentado a la mesa con un vaso de agua en mano. La comida estaba cubierta para que mantuviera su calor y sabor* -Es pasta con crema de champiñones…- *Recorrió su asiento y se puso de pie para verlo de frente*

*Su mirada bajó ligeramente para ver su vestir, a lo que duró tan solo un instante antes de volver sus orbes arriba* -…Estoy bien con esto por el momento…- *Señaló sin problema. Si salía en ese momento, en su estado actual, seguramente tendría muchas complicaciones, porque si, el nuevo cambio y actualización a su persona habían afectado, quizás no se notaba de modo externo, pero interno, estaba agotado. Usar su Chain durante la caminata bajó su energía, al igual del esfuerzo que hizo arreglando el jardín. Por ello, adaptarse a lo que sería su nuevo “cuerpo” también costaría un poco*

-Duele…- *Mencionó ante el pellizcó, más no le quitó su mano y no cambio su expresión, simplemente se mantuvo indiferente como todo el tiempo. Aunque la reacción que tuvo su compañero no fue la mejor de todas, al ver como el mayor se aprovechaba para tocar al Doll, por ello mismo, aun con la barriga inflada, se levantó para llegar al hombro del demonio y morder su oreja* -Déjalo! No lo estés tocando tan permisivo!- *Gruñó para mirarle retador desde su lugar.

El rubio simplemente se había dejado hacer por el contrario, pero no hubo cambió ninguno en su expresión facial, solo una simple desviación de su mirada ante el agrado de la caricia, más cuando lo hizo en la parte posterior de su oreja. Aquel cariño lo único que hacía era recordarle a sus raptores* -…Se siente bien…- *Afirmó simple, sorprendiendo al animal y dando la respuesta posible que buscaba el mayor.

Quizás algo que se estaba confundiendo es el que, sintiera, y que prestara atención a ello, puesto que desde su mala activación, siempre había tenido presente en su cuerpo la sensaciones, que poco a poco con los años comenzó a comprender, llegando, incluso a señalarlo, al igual que el frío que sentía en momentos, o el dolor, que muy poco avisaba, pero era presente. Todo ello ya estaba, pero no era mucho de notarlo él solo, por eso fue diferente cuando el demonio hizo contacto, ya todo era más claro y entendible para su ser* -July ¿Te encuentras bien?- *Cuestionó el otro algo preocupado, eso de que no los mirara era extraño, siempre acostumbraba a tener la mirada fija contra la de su locutor* -…- *Más no le contesto a costo de que no sabía ni que decirle, estaba confundido con su propia existencia*

*Por más que quisiera ayudar, Mao en ese momento era inservible, no entendía lo que era realmente el pequeño y ver como el responsable le miraba en busca de ayuda, simplemente le negó con la cabeza y bajó de su hombro para verlos de una buena distancia, esperanzado de que se pudiera arreglar su compañero.

Para el Doll, lo que estaba viviendo era nuevo, era un fuerte golpe que por más que doliera le gustaba y si, eso era tan masoquista. Aun así, cuando volvió a chocar con aquella llamativa mirada carmín, no presentó cambió alguno en su expresión, ni una señal de disgusto, agrado o vergüenza ante su acto, ni mucho menos pena por preocuparlo, pero así se sentía ¿Era eso, cierto? Las palabras no salieron de sus labios, lo dicho por el mayor de algún modo fueron lo que quitaron de si una ilusión inconsciente de ser alguien llamativo.

Y ahí estaban de nuevo sus caricias, eso, quería que se quedara, tenerlo. Pero no actuó ni hablo, solo lo dejó proseguir con lo suyo. Se quedó pensando en su mismo lugar ¿Qué quería? ¿Cómo debía de ser? ¿Qué sentía? Tantos cuestionamientos brotaron al instante y ninguno fue aclarado de modo consciente. Después de un buen rato sumergido en sus pensamientos, fue a poner todo en claro con aquel mayor, con su padre, hablar sería la mejor opción y quería, por primera vez en su sana y corta vida, ser escuchado* -…Dormiré después…La hora adecuada para recuperar energía es entre las 9 de la noche y 6 de la mañana…- *Mencionó mecánico llegando a su lado, para mirarlo recostado ahí.

El menor, como reflejo, llevó su pequeña y suave mano a la frente del contrario y acomodo ligero sus cabellos mientras fijaba su mirada directamente en él* -…Déjalo así…- *Su voz sonó clara, pero su tono de voz algo bajo. Mao, que los seguía de cerca intento comprender como pensaba el menor, pero era imposible, tal parecía que sus deseos era estar junto a Koujaku* -Se sienten bien…Los cambios…Me gus…- *Se detuvo al instante, al darse cuenta de lo siguiente que iba a decir. Estaba consciente de ello y ahora comprendía, de cierta forma a lo que se refería.

Dejó su rostro y devolvió su brazo a su costado, pero su mirada, aquella indiferencia seguía presente mirándolo penetrante, curioso por más de él* -…Continua…Podré con estos cambios y los siguientes…- *Fue ahí donde una apenas visible sonrisa se mostró instantánea* -Me has hecho 135% más resistente…- *Y como rápido llegó aquella sonrisa, rápido desapareció, ladeando su cabeza ligeramente* -…Seré mejor…- *Aclaró firme. Sabía que desde siempre había tenido muchos defectos, como uno de ellos era tener que dormir para recuperar energía y más. Quería mejorar, crecer, pero aquello a pesar de estar presente, no lo entendía*

*Sabía perfectamente que volverse un humano no era una buena conveniencia para un artefacto de combate como lo era él, que se suponía que sería lo más adecuado para seguir a su amo y estar atento para mantenerlo vivo tanto era posible en combate, más nunca había sido lo suficiente ni para ello, por eso estaba ahí, solo, bueno, ahora de regreso en manos de su creador.
Aun así, sus tentadoras palabras, pensar que podría disfrutar de tantas cosas que solo ellos podían, vivir como algo más que una muñeca, quizás aquello es lo que lo hacía quedarse en ese mismo sitio* -…- *Más no le contestó, porque volvía al conflicto en su mente. La actualización realmente había influido mucho en él, ahora, parecía pensar más las cosas.

Gracias a las palabras por parte del mayor, lo primero que hizo el Doll después de dejarlo descansar fue dirigirse, como dijo, a su habitación. Tenía todas las intenciones de recolectar más información de lo que fuera a encontrarse, y leer era uno de sus pasatiempos cuando se veía la oportunidad y los libros, claros*

-July…- *Lo llamó el pequeño animal, el cual lo acompañaba lado a lado, ahora sentado sobre sus piernas, mientras el menor leía sentado en el suelo del cuarto. Ya había pasado unas horas, y ya había terminado de leer algunos libros, los cuales, claro, simplemente pasaba a leer entre líneas. Este sin dignarse a mirarle simplemente lo dejó continuar, lo bueno es que la ardilla ya lo conocía mejor* -¿No tienes miedo?…Cambiar lo que eres para ser otra cosa ¿Eso no te asusta?- *El pequeño animal tembló ligero, algo confundido. El Doll, lo notó a lo que bajó el libro y le dedico unas caricias* -…Seguiré cuidando de ti, Mao…- *Fue lo único que le contestó antes de proseguir su lectura.

En ese mismo lugar, quien más conocía lo que había vivido el chico, lo que se supone había sufrido y en el presente, lo que había cambiado, era sin duda Mao, su compañero y cuidador. Le quería un bien, pero el trato se había hecho diferente en tan solo unos momentos, eso le asustaba, por eso dudaba más y más en el demonio* -Eh? ¿July?...¿July estás bien?- *Se exaltó ligero al ver como el chico comenzaba a cabecear en ese mismo lugar* -…Parece…Que mi sistema necesita…Una recarga…- *Claramente tenía sueño, ahora sentía los ojos pesados y el cuerpo débil, incluso, le costaba concentrarse en su lectura. Era realmente extraño.

Simplemente no resistió y se dejó caer al suelo para poder dormir. Siempre había sido de dormir donde fuera, sin importancia del lugar, situación y clima, solo recargaba energía. La pequeña ardilla simplemente al comprender se puso cerca suyo, acurrucado y envuelto en su cola. La noche ya se haría presente, lo bueno es que ahora si tenían un hogar*  

-...- *Comenzó a abrir sus ojos en cuanto su sistema se encontró completamente revitalizado. Fue en ese momento que se dio cuenta del cambio. Ahora estaba dentro de la cama, bien arropado y al parecer* -...Otra ropa...- *Era consciente de lo que pasaba cuando si sistema caía en reposo, pero nunca creyó lo inofensivo que esa noche estuvo para no sentir ni uno de los cambios efectuados, incluso, pudieron haber tomado aquel lugar y él ni siquiera se daría cuenta para ayudar a su Creador.
Soltó un ligero suspiro como reprenda a su descuido. Salio de la cama y se percató que la ropa le quedaba algo grande...Pero era de esperarse de que no se quejara, simplemente siguió su camino en dirección donde parecía estar el mayor, olía a comida y extrañamente reaccionó a ello*

-...¿Mao?- *Fue así, como bajando las escaleras notó a su compañero espiando desde lejos al demonio, al cual miró de reojo. La ardilla se erizo totalmente al ser descubierto y le miró con fingida inocencia* -Oh! July...Despertaste ¿Dormiste bien? Parecías cansado- *Le señaló riendo nervioso para subir a su hombro y acariciarse en su mejilla* -¿Qué es lo que huele?...- *Cuestionó al mayor manteniéndose bajo el marco de la entrada mirando detenidamente al contrario.

Examinó el diario que cargaba e intentó leer alguna noticia desde su lugar, pero mejor lo dejó y fue a su frente. A pesar de tener su indiscutible rostro inexpresivo, se podía sentir aquel disgusto por parte del chico* -Anoche...¿Sucedió algo?...¿Te encuentras bien?...- *Mao dio un ligero salto al notar la preocupación que el chico tenía por el mayor, ese sentimiento de culpa de estar distante en sus "sueños" que solo se dejó llevar* -¿July?...No pasó nada, muchacho- *Le acarició la mejilla para que pudiera relajarse un poco, pero lo único que logró en su persona, fue que bajara su fría mirada, apartándola de la carmín* -...Lamento...Mi imprudencia...-