Visitando a mis compañeros caidos

*Estaba claro y no iba a dejar de pensarlo, este chico era interesante y le llamaba mucho la atención. Ahora le mostraba varias sorpresas. Eran tres, si, no estaba ni ebrio, ni tenía la vista mal, eran tres Zoryou en su presencia, excelente. Pero no tenía duda, era bastante observador, y esos chicos eran los de antes* -Oh vamos, si las cosas se ponen interesantes- *Dice mostrando más clara su sonrisa al momento de que se les acerca y fija su mirada en el “original”* - Los helados son buenos- *Además era muy despistado en cuanto a darse gustos por lo que no sabía de ningún lugar vivo en Shizuka que vendiera helados o postres. Que descuidado de su parte.

Escucho atento a sus palabras, así que en total eran ocho y al parecer cada uno representaba diferencias, podría irlo conociendo más* -Si…Lo mejor será conocerlos poco a poco- *Se dijo a si mismo en cuando dijeron de invitar a los demás, no tenía la capacidad suficiente de soportar a más de unos dos con actitudes diferentes. Miró al par que se presentaba volviendo a su indiferencia colocándose más cerca de Zoryou* -Rosado y Verdeson, así se llamarán para mí, el único que idiota al que lo tomaré por su nombre es a este- *Les señala a Zoryou todo serio. Después de todo, aun no los conocía bien y por lo que recién veía, eran bastante animados, le recordaban tanto a su hermano, aun así, no se iba a fiar* -Lo digo por sus ojos, tienen tonalidades diferentes y si no fuera por ello…Seguro y no sabría distinguirlos con él a no ser por su actitud, pero así es más fácil para mi…Además, no me complicaré la vida aprendiéndome sus nombres…Ocupo espacio en mi memoria para cosas más importantes- *Y de nuevo con su estado engreído, les escrutó con la mirada, dejando como entendido que no habría cambios a su palabra.

En cosas como estas era serio y pondría su límite. El contrato había sido hecho con el peli-azul original y no con sus otros lados, por lo tanto, era como si todos ellos fueran diferentes personas, no las iba a aceptar simplemente por ser parte de su contratista*

*Sabía que su elección con aquellos dos nuevos acompañantes no era lo mejor, además, con solo verles las caras con sus reacciones sabía que sería costoso incluso para los tres acostumbrarse, pero en algo si tenía razón, no se iba a llenar la memoria con nombres inecesarios, cuando el único que le interesaba ahora era Zoryou* -También pensé que Rosadito era muy marica para ti, así que solo será Rosado, a no ser que te guste en otro idioma? Pink? Pinky?- *Debía confesarlo, era malo para poner apodos y esas cosas, no era como su gemelo que sabía a quién ponerle qué de sobrenombre.

Su mirada se fijó al original escuchando atento a lo que decía. Trillizos, una linda palabra tan familiar y que los unía* -Podría ser…Pero en todo caso…- *Se le puso más cerca, como si se ocultara de forma infantil* -Solo a ti te aceptaré, y debes tener cuidado, incluso tú yo mismo puede traicionarte- *Le susurró para que solo él lo escuchara. Aunque no estaba del todo seguro de que el resto que aun no se hacía presente lo haya escuchado.

Fue así como se dispuso a abrir paso en dirección a la salida de aquel lúgubre lugar* -Y bien? Vendrán? En verdad quiero un estúpido helado ahora- *Les dice deteniéndose y mirándoles de reojo, esperando a que lo guiaran, con esa mirada gélida y su actitud del asco como se presentó al principio. Debía aprovechar y darse ese pequeño lujo, en verdad lo deseaba*

*Contesto a Rosado con una sonrisa. Ya sabía que esa sería su respuesta, después de todo, era raro cuando no atinaba cosas como eso. Podía deducir, hasta el momento, de que esos tres podrían ser de los pacíficos de Zoryou, cosa que no le importaba mucho y simplemente los tendría vigilados.

Se mantuvo callado y atento ante su alarma. Si, 8 contra 1 podría ser una interesante batalla más si se sabía las debilidades de su contrincante, pero ese no era el caso. Soltó una leve risilla y simplemente no pudo evitar el contestarle de igual modo, gélido como siempre* -Créeme que mi fidelidad no es nada común- *Le señaló con la mirada la mano en donde tenía el sello* -Si te sientes incómodo conmigo, déjame decirte que otro de los beneficios, por tu parte del contrato, es que si yo llego a atreverme a traicionarte, esa cosa simplemente me regresará al cielo para recibir mi castigo, que podría llegar incluso a ser la eliminación total-

*Divertido ante su respuesta se dispone a seguir caminando, no tenía que más decirle, las cosas quedaban claras* -Además, también por eso te lo di, para cuidarte, si son un desastre juntos, lo mejor será que ahora te cuentes como 9- *Así se adelantó un poco antes de continuar el paseo junto a esos tres. Al menos su vida por fin tendría algo de color *