La llegada [Libre]

No mas de dos horas habían pasado desde mi llegada a la ciudad y en ese tiempo pude observar que, era una ciudad con una evidente división de clases y por lo que parece de personas también, los que veía por las calles parecían humanos, pero algo en sus miradas me hacia dudarlo.

Sabia que tenia que ir a un lugar público como una plaza o palacio de gobierno, de ahí conseguiría un mapa o croquis de la ciudad para poder encontrar donde quedarme, el hecho es que de verdad no me orientaba y algo en el ambiente me decía que debía apresurarme antes de que anocheciera, pues el cielo comenzaba a pintarse de colores anaranjados y purpuras por el anochecer.

"Debería pedir indicaciones" Pensaba mirando al cielo " Si planeo quedarme aquí...tendrán una biblioteca? Ojala que si, ahí podría trabajar" Negando levemente "Esta bien comenzar a hacer planes pero debo concentrarme en lo primero!" Regañándome mentalmente y haciendo involuntariamente un gesto de desaprobación.

Caminaba calmadamente, para una persona que llevaba prisa por encontrar algo abierto o alguien en las calles, sin  salir perjudicada en el proceso.

Off: Con su permiso, tomaré este post~~~
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*Ya comenzaba a ser una costumbre suya caminar por las calles de la ciudad a altas horas de la noche, claramente después de haber arreglado algunos asuntos. En esta ocasión, el tiempo se puso de su parte, causando que terminara con bastante tiempo de sobra, no tenía mucho que hacer. No tenía un trabajo fijo y mucho menos personas con quien estar. También ni las quería. Era un alma solitaria, vagante, con una meta del momento, encontrar a su gemelo y darle una buena paliza por haberlo hecho buscarle durante tanto tiempo.

El pelirrojo, con un rostro inexpresivo, vestía con su usual toga obscura con pequeños detalles rojizos, andante sin calzado y silencioso por dónde iba. Debía mantenerse, como siempre, alerta de cualquier problema, porque a pesar de que no le gustara aceptarlo, era un ángel, y cuidar de los seres menos fuertes había sido una labor que al nacer se le dio*

-Pero qué demonios te pasa por la cabeza?- *Sonó la voz fina pero masculina por detrás de la chica. La examino de pies a cabeza, su aroma y su esencia. Una simple y normal humana, pero no cualquier humana, no, era un nuevo habitante de esa brillante pero peligrosa ciudad. Se acercó a ella sin problemas, penetrando con su mirada almendra, como si con ella abriera su alma* -Acaso no tienes sentido común? Una chica delicada como tu podría ser, no! Es presa fácil para muchos seres que vagan por la noche- *Afirmó a sus palabras de modo rudo, sin un toque de gentileza ni tacto al habla* -Qué haces fuera de tu casa? Oh es que acaso te quiere suicidar de un modo más…Original?- *Le cuestionaba directo, esperando a que hablara, y si no lo hacía pronto, simplemente la dejaría. Detestaba tener que esperar y dejar esperando a otros, era su política*

*Era irritante en veces su propia naturaleza, eso de cuidar de los débiles seres humanos le irritaba como nunca, puesto que desde joven siempre había sido un desorden, yendo en contra de la ley de los ángeles y simplemente dando la ilusión de que él era un demonio…Pero no. Terminó por soltar un gran y pesado suspiro ante su comentario, al menos atendía rápido* -Tienes buen espíritu como para decir, Buenas Noches…Aquí no suelen ser tan buenas que digamos- *Aclaró de un modo crudo pero realista.

Se quedó por un momento en silencio, pasando su mirada de vuelta a su persona, analizando su aspecto, y ver si de algún modo estaba a salvo estando por su cuenta, pero era una mujer…Eso quitaba muchas expectativas y oportunidades de dejarla sola* -Eres irritante…- *Se tomó del puente de la nariz negando leve con su cabeza. Si había escuchado bien, ella no tenía casa, por lo que no había refugio para su propia persona y en verdad así mismo se hacía decir que no era delicada? Bufó aburrido para volver su gélida y almendrara mirada a la contraría* -…Y bien, Nueva, qué es lo que planeas hacer ahora? …Ten en cuenta que esta ciudad no es para nada segura, ni en día ni en noche para un estúpido humano- *Siempre había sido rudo con las palabras, a pesar de muy calmado que estuviera, y mucho menos planeaba disculparse por ello.

Sin siquiera esperar su respuesta, giró un poco su cuerpo para mirar a sus alrededores, aun con esa mirada indiferente pero bastante afilada, producía miedo a quienes estaban contra él, pero también era un punto de seguridad de su persona* -Por aquí debe de estar el hotel, ahí hay bastante seguridad, se tiene la mejor reserva en comparación de cualquier motel que puedas encontrar a mitad del camino…- *Regresó su mirada a la chica, penetrando en su afeminada mirada* -Aunque me parece raro que hayas llegado a parar a esta ciudad…O será porque te has perdido?...- *Se cruzó de brazos esperando impaciente a su respuesta. Si definitivamente era un estúpido cuando se trataba de tener tacto con las personas*

"¿eh?...Me dijo Irritante!?" pensando mientras sujeto con ambas manos el dije de la Luna, mirándolo detrás de sus lentes con un deje de molestia demasiado notorio "Momento...dijo Humano?...no debería ser...maa quizás si estoy cansada y escuche mal" Cambiando  por un momento la mirada a una un poco mas confundida.

-Que forma de...hablar con las personas...-susurrándolo y soltando un leve bufido, desviando la mirada por unos momentos-" Que diablos con esa mirada ....sigue...sin agradarme"

-Llegue aquí por voluntad propia, en mi viaje escuche de esta ciudad y algo en todo eso me atrajo...aunque...llegando aquí me perdí-en un tono resignado ante su propia distracción-porque no tienen un mapa en los límites de la ciudad?- comienzo a jugar con el dije moviéndolo de arriba abajo-mmm...-volviendo la mirada a su interlocutor- Que tiene de especial esta ciudad para que estés tan alerta....?

*Debía evitar a cualquier costo que aquella situación lo pusiera en un estado malhumorado, y aún más con la consciencia de que aquella joven se encontraba totalmente sola en una ciudad como Shizuka. Concluyó por repetir su vieja acción y suspirar pesadamente ante sus palabras. Es simple instinto de cuidar sabía que lo tenía desde el instante que nació, lo demostraba hacía su gemelo, pero le costaba bastante evitarlo con personas externas a su vida.

Su gélida mirada siguió pegada a la joven, escuchando con suma atención a cada cosa que expresaba* -Es interesante que te haya atraído una ciudad tan lúgubre a como se puso aquí…- *Y así fue como su interés y curiosidad comenzó a revelarse en su ser. Dio un paso hacia su persona y dibujo a penas una visible sonrisa en su rostro, tan fina y coqueta que podía incluso llegar a encantar* -Un viejo lugar que se encuentra en media ruina dudo que tenga mapas en sus límites. Lo que más queremos es que no haya personas lastimadas…- *Así mismo le tomó delicado de su mentón, para elevarle tan solo un poco su mirada y que chocara así con la propia almendrada* -Y…Déjame decirte que no es “especial” esta ciudad, si no, quienes lo habitan…- *Respiró profundo y se acercó aun más, casi para rosar sus labios* -…- *Más los pasó y fue donde su oreja, así susurrarle tan discreto como pudo* -Aquí las barreras entre las razas es limitada…Ya no sabes ni con quien o que te puedes topar- *Así mismo, mostrando por un momento más aquella sonrisa, se separó de su cuerpo para volver al frente, dándole la espalda.

Miró el cielo, con aquella fría y desinteresada expresión de antes* -Lo mejor es que te escolte hasta que te encuentres en un lugar seguro. Como te dije, el Hotel puede ser una opción relativamente perfecta- *Mencionó sin siquiera mirarla, simplemente quedándose en su lugar esperando a sus palabras*

*Era sorprendente la manera en que podían reaccionar los humanos, dejándose llevar tan rápido por una simple acción de un desconocido, y esa chica sí que tenía suerte de haberse topado con el pelirrojo, puesto que si hubiera sido otro, quizás no tendría mucha oportunidad de escapar. Aunque…Podría pensarse muchas cosas de este, al ser tan estúpidamente irritante.

Ante las palabras de la joven, Aion giró ligeramente su inexpresiva mirada a ella. Parecía que aún tenía mucho que conocer de Shizuka y mucho de que cuidarse* -No soy el único con esas características…Si planeas vivir por aquí…Te recomiendo que abras tus ojos y estés atenta a todo lo que te rodea…- *En muchas ocasiones odiaba bastante su naturaleza, si tan solo su personalidad dominara ante ello, la dejaría ahí sola a su suerte.

Suspiró profundamente y se giró de vuelta a ella cruzando sus brazos. Le examinó por un momento de pies a cabeza, como si con ello pudiera sacar más conclusiones de su nivel de fuerza. Si, como buen observador y ser neutro en esa ciudad, debía recaudar la mayor cantidad de información con respecto a sus habitantes de aquel lugar ¿por qué razón lo hacía? Ni él mismo tenía ese conocimiento, simplemente lo hacía*

-En todo caso, mujer, aun no me has dicho tu nombre. Cómo esperas que te ayude si ni esa insignificante información tengo de ti…Si te llegan a comer viva, tu lapida se quedará con un gran espacio en blanco a falta de tu nombre…Al menos una persona debe de conocerte por aquí…- *Quizás no había sido su mejor manera de pedir sus datos, pero así era, algo idiota, y era un niño, no podían quejarse de él. Negó leve con su cabeza para terminar acomodando su flequillo, después de desviar su mirada a un lado* -En cuanto al hotel, humana, se encuentra a unos pocos minutos de aquí…Te escoltaré hasta la entrada…- *Se silencia por un momento, así regresando su gélida y afilada mirada a ella* -…Considéralo como…Un regalo de bienvenida…-

-Shijira Strife…- *Mencionó al airé en cuanto la chica lo había pronunciado. Un método algo infantil para recordar cosas, pero era muy usado por su persona, después de todo, servía a la perfección, más si se trataba de un observador como lo era él.

Desde su lugar podía notar claramente el disgusto que la chica estaba teniendo ante sus irritables palabras, se podía oler* -Tsk…humanos…- *Se quejó levemente. Si, siempre le habían parecido seres muy débiles a los cuales, en sí, debía de cuidar, y odiaba totalmente todo lo que tenía que ver con ello, pero de extraño modo, nunca los dejaba desamparados* -Está por el lado Este de la ciudad…- *El pelirrojo levantó su mano y señaló una calle mirándola detenidamente, para que no se perdiera* -De ese lado, también podrás encontrar las residencias de varios de los habitantes…Como es normal, muchos viven de día, otros de noche, solo mantente atenta a todo…Abre bien los ojos y escucha con detenimiento tu alrededor…-

*Su caminar, al igual que su tono de voz era elegante, por eso mismo comenzó el paso en aquella dirección, esperando, claro, que la chica lo siguiera y no se fuera a perder* -Por cierto…- *Le llamó para girar un poco su mirada a ella, específicamente en su pendiente* -No lo hagas muy notorio…Esa cosa es especial para ti, verdad?...Entonces cuídalo…- *Volvió su mirada al frente para seguir caminando, tranquilo, como si no hubiera una prisa por llegar o simplemente como si fuera de día*

-Si yo fuera un ladrón ya te hubiera dejado en un callejón sin muchas opciones de salida y te lo hubiera quitado…Además de otras cosas…- *Terminó por suspirar pesado parando su pasó y girarse de nuevo a ella* -Se más cuidadosa con tu persona…Te lo dije…Esta ciudad no es la mejor a la que hayas llegado…-

*Lo iba a repetir miles de veces más como una simple queja infantil, detestaba a no más poder ayudar a los estúpidos e irritantes humanos. Si quiera tener aquello en la cabeza lo hacía poner cara de disgusto ¿Por qué? Porque a pesar de que no le gustara, terminaba por hacer lo correcto, lo que le habían enseñado sus altos cargos y por supuesto como lo había educado su ya difunto padre, que en si, también había sido de esa tan mencionada raza.

Soltó un pesado suspiro y decidió ignorar más sobre su pendiente, pareciera como si no entendiera, los ladrones no podían ser comunes* -Tomarlo...Solamente para producir en ti sentimientos negativos...Odio, tristeza, desesperación, ansiedad...Desprenderte de algo que para ti es valioso es suficiente para ellos...Con eso se harían más fuertes...- *Susurró lo último casi para si mismo y de una forma tan vaga que denotaba su total desinterés al posible resultado. Más no puede negar que miró a ella para observar como lo guardaba para corresponder con una sigilosa sonrisa antes de volver al frente.

Pronto llegarían y al igual, se desharía de ella, aunque sabía perfectamente como le jugaban las cosas, y el destino se la pasaba jodiendole, así que, la volvería a ver, por eso mismo no se daba del todo el ánimo* -Aion...Ese es mi nombre- *Mencionó suspirante para pasar la mirada a todos lados, no quería husmeantes a su alrededor, menos si se trataba de que escucharan sus palabras. Así mismo se regresó donde ella para poner su mano en su hombro, y le dio un ligero empujón* -Y...No tengo raza en específico...- *Llevó su inexpresivo rostro al cielo nocturno. Puede que con eso la confundiría o en si, la asustaría. Negó leve con su cabeza y le miró de reojo* -Un ángel...Eso soy...Pero mi descendencia es de muchas razas...por eso, no es muy acertado que sea un estúpido ángel...-

*Era inevitable, se odiaba por terminar con aquella descripción, su pasado no fue muy limpio como para darle la batuta pare decir que si era aquel puro ángel que todos deseaban, al contrario, no era MUY bueno como se esperaría, pero tampoco era del todo malo, por eso mismo se salvaba del destierro para terminar siendo un ángel caído; más negarse era lo único que podía hacer*

-Aion -repitiendo  el nombre  de  su guía mientras  lo seguía- "me pregunto que significara?" -saliendo  de sus pensamientos  cuando él de  dio un pequeño empujón, parece que sin quererlo se había detenido,  ese pequeño movimiento en un pasado se lo habían hecho varias  veces  para  que apresurara su paso o salvarla de  los autos, sin poder evitarlo una pequeña  sonrisa  se dibujo en su rostro al recordar  aquello.

-"Un Ángel"...eso no me lo esperaba-Siguiendo su camino, había logrado mantener su paso, mirándole  con curiosidad y escuchando  con atención a la  vez  que intentaba  ver  su rostro pues por como se expresaba  no parecía orgulloso de ser lo que era- Vaya  si que es un poco  confuso -haciendo una leve mueca al tratar  de entenderlo- Como puede  se que un ángel tenga otro tipo de ascendencia -mirando  hacia  el  frente  y repasando todo lo que le habían mencionado desde  pequeña sobre esos "seres celestiales"- es claro  que  no  conozco de estos  temas -diciendo casi en un suspiro, pues  los humanos  siempre podían transformaban la historia  a su conveniencia o necesidad-No me equivoque..."puede que aquí realmente  me distraiga"

*Era interesante la forma en que la chica había repetido su nombre, un acto que le pareció muy familiar; cierto, él lo solía usar. Soltó una ligera risilla ante el pensamiento fugaz para continuar andando* -Información por información...- *Declaró el pelirrojo ante su cuestionamiento. Era claro que se desubicaría por lo dicho, pero para un investigador como lo era él, era esencial* -Los humanos puede que sean curiosos, pero hay cosas que no deberían ni siquiera de saber...Eso los mantendría protegidos...- *Así contesto en voz baja lo último.

Era un ángel despreocupado la mayoría del tiempo, pero se le era imposible negar que le importaban, por eso hacía lo que hacía, cuidarlos. A su paso no se digno de contestar a sus palabras, parecía que alguien más estaba sumida en sus pensamientos* -Bien...Strife...Aquí tienes el hotel...- *Le señaló al frente.

Estaba ansioso de dejarla más pronto posible para poder volver a su tranquilidad, pero era un estúpido, durante ese tiempo se había interesado en la chica ¿por qué había venido a la ciudad? ¿Cuales eran sus razones? ¿Para qué? En ese momento era tan inestable que incluso siguió a su lado* -...Espero tengas lo necesario para registrarte...O que tengas la suerte de que haya una habitación disponible...Si no es así...tendrás que dormir en la calle...-

-"se rió?"-mirando  a si  guía  curiosa, suavizando un poco su mirada- Intercambio equivalente  ¿eh? comprendo eso...muchas  veces  es mejor  ignorar  la  realidad "por que es como un crudo despertar"-Seguía  caminando a  su  lado   esforzándose  por no perderle  el paso  y pensando en  aquello que había dejado atrás hace un tiempo-.

-Dormir al aire libre no es  tan  malo -alzando la vista  hacia el cielo y observando  las  estrellas  que adornaban  el cielo -en mi ciudad  no  se ven mucho las  estrellas, aunque   con las referencias que me diste  creo que no es una opción  sana -suspirando mientras  baja  la mirada  y  miraba la entrada  del  Hotel, después  de un largo  rato  ya  era  hora  de despedirse de  guía inusual-.

-Bueno,  muchas  Gracias Aion, por  guiarme  hasta aquí y  disculpa la  lata por  cuidarme "te lo agradecemos" -colocando  su mano derecha  sobre  su  blusa, justo por encima  de su  dije- antes  de  que te  vayas una  ultima  pregunta ¿Esta  ciudad tiene  biblioteca?-